En la sociedad suelen utilizarse los términos traducción e interpretación como sinónimos, cuando en realidad son dos disciplinas diferentes, pero ¿cuáles son las diferencias entre traductor e intérprete?
Traducción
La traducción consiste en transformar por escrito el contenido de una lengua origen a otra lengua destino. Engloba gran variedad de documentos escritos, subtítulos, sitios webs, aplicaciones, libros y un sinfín de recursos.
Tipos de traducción
Los tipos de traducción se diferencian según la especialidad del texto, es decir, según la temática a la que se refieren. Existen muchísimas ramas y para cada una necesitamos formarnos y conocer muy bien la terminología, el estilo y la estructura de cada texto.
Algunas de las especialidades que podemos encontrar en los tipos de traducción, entre las que Alba Jiménez – Estudio de Traducción está especializado, son las siguientes, aunque existen muchas más:
Traducción jurídica o legal
Traducción especializada en el campo del derecho. Requiere mucho conocimiento de la materia, del vocabulario, así como de las leyes de cada país (contratos, sentencias). Del mismo modo, existe la traducción jurada, para la cual necesitas aprobar el examen del Ministerio de Asuntos Exteriores, Europa y Cooperación.
Traducción técnica
Documentos vinculados con la informática, la ingeniería o similares. Al igual que el caso anterior, el conocimiento en la materia es esencial.
Traducción literaria
Especializada en traducir libros y novelas de un idioma a otro. En este caso, juega un gran papel la cultura y el lenguaje, ya que hay que conseguir mantener las peculiaridades de cada protagonista en el idioma destino.
Traducción médica
Traducción de documentos de ámbito médico. Aunque el traductor no sea médico, debe conocer la terminología como si lo fuera, ya que un error de traducción puede tener graves consecuencias de salud.
Interpretación
Por su parte, la interpretación se utiliza para transmitir un mensaje oral de un idioma a otro. Se trata de un servicio en tiempo real, ya sea al mismo tiempo que habla el ponente (interpretación simultánea) o después de su intervención (interpretación consecutiva).
Tipos de interpretación
Interpretación simultánea
Se trata de la interpretación en tiempo real del mensaje original en la lengua de llegada, es decir, el intérprete escucha lo que el ponente dice y lo transmite al otro idioma al mismo tiempo.
Este tipo de interpretación se suele utilizar en conferencias, reuniones internacionales, entrevistas y programas de televisión, por ejemplo, en el Hormiguero de Antena 3.
Interpretación consecutiva
En este caso, el discurso se interpreta cuando el ponente ha finalizado su intervención. Para ello, el intérprete se ayuda de la técnica de toma de notas para recordar los puntos clave y no olvidarse de nada.
Podemos encontrar ejemplos de interpretación consecutiva en reuniones de negocios, debates y ruedas de prensa.
Interpretación de enlace
La interpretación de enlace es necesaria cuando intervienen varias personas en diferentes idiomas. En este caso, el intérprete se encarga de traducir ambos idiomas (por ejemplo, de inglés a español y de español a inglés).
Se utiliza en reuniones de negocios y comidas de negocio, entre otras situaciones.
Diferencias entre interpretación y traducción
Aunque ya hemos mencionado las características de la traducción y de la interpretación por separado, vamos a ver de forma breve las principales diferencias:
Formato
Los traductores están especializados en cualquier texto en formato escrito, cuya traducción debe entregarse en un plazo de entrega acordado con el cliente. Por el contrario, los intérpretes se encargan de los textos orales trabajados en tiempo real, por lo que tienen poco o ningún margen para investigar o resolver dudas.
Precisión
La interpretación es menos “precisa” que la traducción. Aunque todo profesional intérprete busca la perfección, debido a las dificultades y a la brevedad de tiempo de la que disponen para interpretar, el mensaje puede cambiar con respecto al del ponente, siempre y cuando los puntos clave se mantengan.
Por su lado, la traducción tiende a ser más precisa, aunque depende del tipo de traducción, ya que, por ejemplo, la traducción creativa se aleja a propósito del mensaje original. Del mismo modo, los traductores pueden revisar y buscar información durante el proceso de traducción.
Forma de trabajo
Los intérpretes suelen trabajar en ambos idiomas, sobre todo al interpretar conversaciones entre varias personas. Por el contrario, los traductores tienden a especializarse en una sola dirección idiomática, es decir, suelen traducir únicamente a su lengua materna.
Aunque hemos detallado las diferencias entre la traducción y la interpretación, es posible que tengas dudas sobre qué funciona mejor para tu negocio. Por eso, en Alba Jiménez – Estudio de Traducción, encontrarás el asesoramiento gratuito que necesitas para que tu proyecto alcance tus objetivos concretos con profesionalidad.